El maestro de escuela ante el escrutinio público

David Auris Villegas- davidauris@gmail.com https://orcid.org/0000-0002-8478-673 Los educadores son protagonistas sociales por naturaleza. Cada acción pasa por el lente del escrutinio público. Los resultados de su labor pedagógica pueden impactar en su prestigio o su aniquilación personal y académica, haciendo de esta actividad una profesión soberbiamente sensible, ya que un maestro, en su dilatada labor, puede inspirar cientos de vidas o sencillamente apagar miles de sueños. Las expectativas sociales que se concentran en los maestros cobraron un duro revés, con esta grave revelación. A finales del mes de mayo, en Radio Programas del Perú, la educadora y líder del Consejo de Mujeres Awajún, Rosemary Pioc, dijo que desde 2010 al 2024, se han registrado 524 denuncias formales, contra maestros por agresión a los estudiantes de la provincia de Condorcanqui, región Amazonas. Este testimonio se hizo eco en los titulares periodísticos y ha generado un debate público que deja mal parado al magisterio peruano. Con respecto a esta agresión y perjuicio hacia las niñas y niños por parte de estos educadores, considerados superhéroes por los estudiantes y padres espirituales por la sociedad, el Dr. Morgan Quero, actual ministro de educación, lo ha mencionado como una costumbre cultural. Con toda honestidad, creo que el ministro debió condenar este abusivo maltrato e impulsar una exhaustiva investigación y, desde el momento, asignar un equipo de psicólogos que puedan brindar apoyo a los estudiantes afectados y sus familias. Retornando a la acción docente, no basta que los maestros transmitan conocimientos y ostenten grados académicos en nombre de la meritocracia. Como hemos podido apreciar, no todos los educadores cultivan y ponen en práctica los valores morales como piedra angular de su magisterio, por lo que urge implementar una permanente capacitación y seguimiento constante en habilidades blandas y empatía solidaria que recomienda la Unesco, para humanizar más a esta hermosa profesión. Dado que la formación del educando se basa en principios éticos, la sociedad no solo debe limitarse a criticar contra las acciones negativas de algunos maestros, sino asumir un compromiso de cooperar estrechamente con el ejército docente, de tal manera que todos eduquemos el hábito saludable de vivir en armonía y respeto. En el aula o fuera de ella, asumamos el reto social de practicar la ética de hacer el bien a los demás y minimizar el sufrimiento a las personas para un mundo más humano y compasivo, Argumenta la prestigiosa filósofa española, Adela Cortina. Los educadores son motores de cambio. Como ingenieros sociales junto a la sociedad, son los llamados a desarrollar un liderazgo compartido para una vida mejor o infeliz de los estudiantes. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.

Derechos humanos y ciudadanía para una vida mejor

David Auris Villegas – davidauris@gmail.com Se supone que el Gobierno, el Congreso y el Poder Judicial son los guardianes de la ciudadanía y los derechos humanos. No obstante, ¿es correcto que la presidenta exhiba sus costosas joyas en comunidades pobres y 82 legisladores, de los 130, estén investigados por la Fiscalía, según Transparencia? Esta banda de politicastros, en vez de contribuir al bienestar, impulsan leyes a su favor y pugnan reelegirse para ganar impunidad. Ante este panorama desalentador, optemos por la resistencia social desde la educación para encarar este atroz ataque contra la dignidad humana. Este desprecio social por parte de los gobernantes, han generado una profunda desigualdad, provocando la exclusión humana. Según la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento, en la actualidad, 3.3 millones de peruanos no tienen acceso al agua potable y 6.4 millones no disponen de alcantarillado. Además, en nuestro país se registran 8 denuncias al día por pensión alimentaria y cuatro mil asaltos diarios, poniendo en tela juicio que la cultura ciudadana está invadida por la irresponsabilidad y la violencia. La implementación del Proyecto de Educación en Derechos Humanos de Unesco, empodera en los estudiantes los valores cívicos y la responsabilidad humana para generar personas comprometidos con el bien común. Al discutir en las escuelas, casos concretos, tales como la delincuencia, los abusos, la pobreza y el abandono de los padres, se fomenta una cultura solidaria para construir un Perú mejor, donde las leyes no amparan al ciudadano de bien, sino a aquellos que rompen las normas. Esta Ciudadanía propicia de que la vida se desarrolla en colectividad y no en la individualidad. Como sociedad, sigamos el legado del monseñor salvadoreño, Óscar Arnulfo Romero, quien nos invitó a capacitar a los niños y jóvenes en el análisis crítico de la realidad, como agentes de transformación, para que participen en la vida política y democrática. En este transitar, cada ciudadano somos activistas del bien y del mal y cabe esta pregunta ¿En qué lugar de la batalla nos encontramos? La implementación de los derechos humanos es esencial para una plena convivencia y es una garantía de un futuro sostenible. En la escuela, desarrollemos la convicción que todos tenemos el derecho de vivir y que nadie puede quitar la vida a los demás. Aprendamos que ciudadanía es respetar a los demás. Asimismo, es fundamental perfeccionar el diálogo como el medio más poderoso para solucionar cualquier dificultad. Practicar la ciudadanía y los derechos humanos es un acto de justicia social y respeto. Es una de las formas de enfrentarnos a la corrupción y la violencia que está conduciendonos a la bancarrota y la deshumanización. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.

Desafíos de la acreditación universitaria peruana

David Auris Villegas – davidauris@gmail.com La acreditación universitaria en el territorio peruano se encuentra en una situación inquietante que aún no avanza. La prueba de ello es que no superamos la media docena de universidades debidamente acreditadas, de un total de 93 licenciadas. La acreditación no es solo para atraer más estudiantes y lucir la estrellita de “Universidad acreditada”, sino, es un compromiso de formar profesionales cada vez más innovadores y productivos.  Al establecer estándares precisos de nivel internacional que permitan la cientificidad y una acreditación obligatoria a todas las universidades peruanas, estamos abriendo el paso hacia la calidad educativa en la educación terciaria. Asimismo, es importante hacer comprender a la sociedad, a los funcionarios y a las industrias que, esta acreditación, va a acelerar nuestro camino hacia el progreso, facilitando nuestra una presencia en el mercado manufacturero. Según el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (SINEACE), órgano oficial del Estado peruano que acredita la calidad de las universidades públicas y privadas, sostiene que la acreditación beneficia a la universidad en su posicionamiento, calidad docente, investigación y becas. En ningún párrafo dice que beneficia al desarrollo sostenido del país que, en el fondo, es la razón de toda acreditación universitaria. No obstante, el Sineace presenta estándares generales que poco contribuyen a la calidad. En el Modelo de Calidad para la Acreditación de Programas de Estudios de Posgrado del año 2022, en el estándar 9 referido a la investigación, dice: “El programa de estudios de doctorado asegura que las investigaciones siguen líneas de investigación actualizadas, gestiona proyectos de investigación propios y en alianza con otras instituciones nacionales e internacionales y, garantiza la integridad ética de las investigaciones”. Ahora: ¿De qué manera la institución podrá alcanzar este estándar? ¿Basta con llevar a cabo cualquier investigación descriptiva, tal y como hoy es habitual en las universidades peruanas? Dado que Sineace no está vinculando a la acreditación con el desarrollo del país, solo exige acreditar a los programas de Salud, Derecho y Educación, y en el resto de carreras es voluntario. Olvidan que los rankings mundiales, se centran en la investigación y la innovación. Además, creo que no tienen conocimiento de Andrés Oppenheimer, quien, gracias a sus investigaciones, sugiere que los países subdesarrollados deben impulsar las ingenierías científicas, para producir tecnologías y así sobrevivir a la avalancha de competitividad global.  Es imperioso impulsar una masiva acreditación universitaria obligatoria en el menor tiempo posible. Para ello es necesario una mayor inyección de dinero a las universidades públicas y, una urgente reingeniería en Sineace, con líderes visionarios capaces de visualizar un Perú desarrollado. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.

Ciencia, tecnología e innovación para el desarrollo

David Auris Villegas – davidauris@gmail.com Impulsar la curiosidad científica en los estudiantes, es clave para desarrollar la ciencia, la tecnología e innovación con la finalidad de desarrollar a nuestros países. Esta educación científica es una poderosa herramienta que permite explotar el infinito potencial del cerebro humano. Al ver la vida desde un enfoque innovador, amplía las oportunidades de sobrevivir con éxito en esta jungla social cada vez más impredecible. La ciencia y la tecnología son esenciales para el desarrollo, ­–han demostrado, países antes pobres, entre ellos Singapur y Corea del Sur–, que, lamentablemente los líderes del sistema educativo peruano todavía no comprenden, ya que ingenuamente, han convertido a los docentes en “papelucheros”, para justificar las evidencias de Las experiencias de aprendizajes repetitivos y lineales.  Esto evidencia el informe de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), Perú ocupa, el puesto 76 de 132 países en Índice Global de Innovación, (IGI) en el año 2023.En el año 2023, con la finalidad de escalar nuestra posición innovadora, el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica, (CONCYTEC), destinó unos S/224 millones para impulsar la ciencia, tecnología e innovación, que es apenas el 0.1 % del presupuesto nacional.  Esta suma no es suficiente para desarrollar el talento científico. Gran parte de ello cubre la burocracia, otra parte se destina a la premiación de las investigaciones y resta poco para impulsar la real innovación de impacto, pues vivimos en la fiebre de la meritocracia de papel y concursos de ciencia que poco aporta al desarrollo. Para el legendario Elon Musk, innovar es tener visión emprendedora, pensar y crear una idea tangible y actuar, dándole un mejor valor agregado que sirva a las personas, con la ayuda de un equipo multidisciplinario. En este sentido, ¿las escuelas de países en desarrollo estarán desarrollando esta mentalidad innovadora en los estudiantes? La repuesta es un rotundo no, debido a que la enseñanza está centrada en notas altas para aprobar los cursos y no para pensar, crear e innovar para la vida. Ante esta dura realidad, es momento de que la Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, (STEAM), tenga una agresiva presencia en la formación básica de los estudiantes. Para ello, abracemos la ciencia, la tecnología y la innovación invocadas por el líder chino Deng Xiaoping, con el fin de salir del subdesarrollo y cambiar el futuro de las sociedades llamada tercermundistas. No hacerlo, equivaldría a traicionar el destino de la humanidad, que es la de vivir mejor que antes. Enseñar la ciencia, la tecnología y la innovación en la escuela de la curiosidad, no solo es brindar conocimientos, si no, es expandir la mente infinita de toda una generación de ciudadanos rumbo al desarrollo sostenido. © David Auris Villegas Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.

Día de la madre en las escuelas

David Auris Villegas – davidauris@gmail.com Cada segundo domingo de mayo, al celebrarse el Día de la Madre en muchos países del mundo, las escuelas se colman de vibrantes alegrías, discursos de amor y poemas del alma.  Sin embargo, ¿es factible que este año vayamos más allá de los tradicionales homenajes y reconozcamos a las progenitoras como nuestra primera maestra de nuestra vida? Sin lugar a dudas, desde las aulas, estaríamos reconociendo su papel como educadoras del hogar, líder incansable, fiel servidora, sostenedor de la familia e inspiradora de toda sociedad. Ya que, sin poseer un título de maestra y sin importar su condición social, estado civil o situación de salud, ellas forman a cada individuo desde su nacimiento, con el amor que es el extraordinario prodigio de la existencia humana, señalan Francisco Grass y Pilar Maiz. Durante el mes de mayo, los maestros, en su labor innovadora, pueden comprometer a los estudiantes a conversar con sus madres acerca de sus vivencias y enseñanza materna. Luego, este diálogo grabado, los niños y los adolescentes la compartirán con sus compañeros del aula con el objetivo de producir contenidos de impacto y difundir en las redes sociales, resaltando el valor fundamental de las madres como la primera maestra del hogar y de la sociedad.  Por otra parte, los maestros pueden organizar grupos de estudiantes para que entrevisten a algunas madres de sus escuelas previo sorteo. Una vez seleccionada la entrevistada, los estudiantes con la colaboración del docente formulan las interrogantes pertinentes acerca de la labor ardua de las progenitoras, su resiliencia, el amor incondicional y el empoderamiento empático. Las entrevistas se realizarán en los hogares de las madres y, para ello, coordinarán con ellas. Una vez finalizada la entrevista, los estudiantes la convertirán en podcast para su difusión en la internet. En este hermoso gesto, en las instituciones educativas es fundamental que los docentes resalten el papel de las progenitoras, como la primera influencer en la vida de los niños. En la familia, esta genuina aliada de la educación, día a día fortalece los vínculos afectivos y transmite valores de amor, cuidado y esfuerzo, que son esenciales para el logro de los aprendizajes y el desarrollo humano, desde su condición materna siendo la más blanda y la más poderosa soberana de los espíritus, dice, el padre Eduardo Pavanetti. Al considerar a la madre en las escuelas de una manera más vivencial y aliada pedagógica, estamos no solo reconociendo a las mujeres que nos brindaron la vida, sino también reconocemos la relevancia de su función como nuestra primera maestra de la vida, en la construcción de un mundo más amoroso. © David Auris Villegas Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.
Artículo: Los libros, clave para el éxito educativo

Los libros, clave para el éxito educativo

David Auris Villegas davidauris@gmail.com Abril, un mes repleto de significado. El pasado 23 de abril, celebramos el Día del Libro. Este formidable instrumento ha transformado a la humanidad y continúa empoderándonos a los lectores de: Cervantes, Shakespeare, el Inca Garcilaso de la Vega y tantos escritores. La lectura otorga poder a los estudiantes al expandir sus horizontes mentales y emocionales. Le brinda un acceso a una amplia gama de conocimientos, perspectivas, enriqueciendo su pensamiento crítico, creativo y visionario, que constituyen las habilidades fundamentales para alcanzar el éxito en la vida. De acuerdo al Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (CERLALC), en el mundo hispano, los peruanos leemos tres libros por año y los españoles leen alrededor de diez, en contraste con Finlandia, que leen alrededor de cincuenta libros al año. Esto implica que el Estado debe impulsar una masiva promoción de la lectura, considerándolo como elemento relevante en la educación de los estudiantes, de lo contrario continuaremos anclados en el subdesarrollo. Los expertos coinciden en que la escasa lectura durante la formación del estudiante tendrá un impacto negativo en el ámbito escolar y en su entorno social. En la escuela, al no cultivar el hábito lector, será difícil continuar con éxito su formación profesional. Asimismo, en el ámbito social, la falta de lectura puede obstaculizar el desarrollo de la empatía y la capacidad de entablar conversaciones significativas, causándole un aislamiento y dificultad para interactuar en una sociedad que se mueve en función de la comunicación. Para el más grande del siglo XX en lengua castellana, Jorge Luis Borges, la lectura constituía una forma de felicidad y el acontecimiento capital de su vida fue la biblioteca de su padre. Y para nuestro querido Premio nobel, Mario Vargas Llosa, dice que la cosa más importante que le ha sucedido en la vida fue aprender a leer. En este sentido, la lectura nos conlleva poseer una cultura que es motor de desarrollo de un país. Parafraseando a la Unesco, podríamos decir que esta cultura es una forma o estilo de vida de una persona o una sociedad. Puede ser moldeada y fortalecida mediante la lectura en la escuela, en la familia y en la colectividad, haciendo de nosotros, ciudadanos responsables y capaces de convivir en una verdadera armonía como una sociedad civilizada. ¿Y cómo está nuestra cultura en este mes de las letras? Imitando al gran Bertolt Brecht, cabe estas extrañas disquisiciones: ¿Es posible caminar seguros con nuestras novias por las calles de las grandes ciudades? ¿Podemos circular por las veredas sin tropezarnos con objetos de negocios? ¿Existen bibliotecas públicas en las localidades más alejadas? ¿Todos los niños y jóvenes en edad escolar se encuentran en la escuela? ¿La sociedad considera que el camino más rápido para obtener ingresos es la política? ¿Por qué la presidenta peruana visita a los lugares más pobre del país, luciendo joyas valoradas en miles de dólares? ¿Por qué el delincuente no acepta que ha robado? Ante tantas interrogantes, volquémonos a leer algún libro que nos ayude a vivir sin trampas para ser mejores personas. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.

Gloria Machuca Chinchay: maestra que inspira vida

David Auris Villegas – davidauris@gmail.com A veces me resulta difícil escribir desde mi comodidad, cuando en los lugares agrestes, muchos educadores se juegan la vida por los estudiantes. La maestra rural, Gloria Machuca, es una de ellas. En su caminar pedagógico, se resbaló y fracturada, sobrevivió ocho días, en el acantilado del distrito de Ámbar, provincia de Huaura en Lima, gracias a su resiliencia y coraje. De lo que sabemos, la maestra Gloria, tras ejecutar sus clases en la escuela rural Fundo Paracas, de vuelta al distrito de Ámbar, cayó en un abismo de aproximadamente dieciocho metros. Se fracturó las extremidades inferiores y las costillas que la inmovilizaron y sobrevivió con dos barritas de chocolate, una bolsa de suero, queso, agua del río y una auténtica fe en la vida. Controlando a su desesperación, dolor y miedo, usó la tabla de picar y escribió esta frase de auxilio, demostrando su formidable serenidad que transmiten los educadores a los estudiantes: “Auxilio… bajé de Paracas, me caí y me perdí, ayer dormí en el monte, por favor, quien lea esto venga a ayudarme o dé aviso a defensa civil, para que me rescate. No puedo caminar y nadie pasa por aquí, estoy cansada de gritar, pero nadie escucha…”  El domingo 7 de abril, fue rescatada. Más allá de la tablita, su voluntad de vivir, su amor por sus seres queridos y a sus discípulos la mantuvo viva. Su extraordinaria resiliencia la impulsó a enfrentar el padecimiento, el miedo a las noches oscuras y a la incertidumbre bajo el gélido aguacero. Ante estas dificultades, evidenció que el espíritu humano puede superar los obstáculos más difíciles de nuestro destino. Sin embargo, ante esta dura experiencia, asombrosamente, tanto el Gobierno como el Ministerio de Educación no se han pronunciado hasta el momento.  ¿Acaso la actitud de estas autoridades, demuestran su desinterés y ninguneo por las docentes rurales y por los estudiantes que habitan en las zonas inhóspitas del Perú? Para no repetir esta dura experiencia, es urgente que el Estado interconecte todas las escuelas rurales del país. Esto posibilitará a los estudiantes y docentes viajar de forma más segura y, compromete a los padres en el seguimiento de las actividades educativas. Impulsándose el progreso socioeconómico de las zonas rurales mediante su integración más plena en la economía nacional. De igual manera, la conexión entre todas las escuelas rurales a través de la internet es esencial para fomentar la colaboración entre los docentes rurales. Esto les brindará la oportunidad de obtener recursos educativos en línea, participar en actividades virtuales y compartir vivencias con colegas de todo el mundo. Esta iniciativa contribuirá a disminuir la disparidad educativa entre las áreas rurales y las urbanas, en la construcción de una equidad efectiva que exige los Objetivos del Desarrollo Sostenible. Gloria Machuca nos inspira a todos. Su amor por la vida es un clamor por un mundo más equitativo y conectado. Las autoridades deben interconectar a las escuelas rurales, para lograr el desarrollo de todos los estudiantes. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.

Entrevista a la Dra. Juana Sancho Gil, educadora y estudiosa de las TICs y referente mundial en Educación

“Siempre me han interesado las TICs para pensar y no solo para aplicar”Juan Sancho Gil Por: David Auris Villegas[1] “La invitación del profesor David Auris Villegas a mantener una conversación sobre el nuevo tema de moda, la denominada Inteligencia Artificial (AI), me ofrece una nueva oportunidad para seguir pensando y mantenerme en modo aprender.  Gracias, profesor. Como he señalado en distintas ocasiones, la educación sigue siendo mi pasión. He dedicado toda mi larga vida laboral a la educación y si hoy tuviera que elegir a qué dedicarme, no lo pensaría ni un segundo: a la educación. De hecho, de formas diferentes, me sigo dedicando. Sigo pensando, como reconoció Albert Camus al recibir el premio Nobel de Literatura, que sin su madre y sin su profesor, el Sr. Germain, “la mano afectuosa que tendió al niño pobre que era yo, sin su enseñanza no hubiese sucedido nada de esto”. Recibir la mirada atenta, el afecto y el calor de un ser humano que nos reconoce, valora e impulsa a aprender, es el mayor regalo que nos puede proporcionar la vida. ¿Queremos sustituirlo por una IA?” Juana Sancho Gil. Catedrática de Tecnologías Educativas del Departamento de Didáctica y Organización Educativa de la Universidad de Barcelona, España.  Esta entrevista, que nos concedió la Dra. Juana Sancho Gil, se publicó por primera vez, en la revista internacional bilingüe de educación y literatura AURIS, número 03. https://edicionesauriseduca.com/web/2024/04/02/revista-auris-ano-01-n-03-enero-2024/ DAV. Estimada Dra. Juana, como especialista en las TICs, ¿qué problemas de dependencia cognitiva pueden surgir en los estudiantes mediante el uso de la inteligencia artificial? JSG. Profesor, gracias de nuevo por su la invitación. En primer lugar, dejar constancia de que más que “especialista en las TICs”, me considero educadora y estudiosa. Desde que participé, a comienzos de 1980, en el primer programa de informática educativa que se puso en marcha Cataluña (España), siempre me han interesado las TICs para pensar y no solo para aplicar.  En relación con la llamada IA, para mí, de momento, contamos con una gran multiplicidad de opiniones, muchas de ellas entusiastas, pero muy poca menos investigación empírica. El fenómeno de la dependencia cognitiva, o sedentarismo cognitivo (Sigman y Bilinkis. 2023), aumentó con los recursos digitales que facilitaron la producción y acceso a la información a un enorme número de personas. Pero, como argumenta Savater (1998, s. p.) “No es lo mismo información que conocimiento. El conocimiento es reflexión sobre la información, capacidad de discernimiento y discriminación respecto a la información que se tiene, capacidad de jerarquizar, de ordenar, de maximizar la información”. La facilidad para encontrar las respuestas deseadas, independientemente de su rigor y veracidad; de acceder, prácticamente sin límites, a miles y miles de fondos de información y plataformas -muchas de ellas diseñadas con tecnologías persuasivas para mantener la atención (Fogg, 2003)- y de conectar con colectivos que refuerzan nuestras creencias y visiones, lleva años contribuyendo a la aparición de transformaciones significativas que impactan los procesos de enseñanza y aprendizaje. Aquí podemos considerar la aceleración del denominado “filtro burbuja”, al aislamiento intelectual derivado de algoritmos para personalizar el resultado de las búsquedas (Pariser, 2017). Al fenómeno del “eclipse” y la dispersión de la atención (Fernández-Savater y Etxebarria, 2023; Hernández y Sancho, 2024). Para Fernández-Savater (2023) “la imposibilidad de la atención se ha convertido en un problema de primer orden. La atención no es sólo aptitud para la concentración individual, sino también la facultad de acoger y escuchar, de cuidar los vínculos” (s. p. cursiva en el original). Esta dispersión afecta a una de las claves de la relación pedagógica y del aprendizaje: la capacidad de ser deseante, al deseo de aprender. Para Simone Weil el deseo “es el gran constructor de mundos y la atención, su herramienta” (Arnau y Martínez Gallardo, 2021, s.p.).  La llamada IA está contribuyendo a la magia de la tecnología, que viene cargada de promesas de mejora de los individuos y la humanidad. Como toda magia nos encanta y hechiza, pero tiene truco. Como educadores, como personas comprometidas con el desarrollo del potencial de cada individuo, hemos de estar alerta y preparados para, como dice un antiguo refrán, distinguir el grano de la paja. Porque ¿de qué nos sirve que un algoritmo nos ofrezca respuestas cuando lo que ha propiciado los mayores avances científicos y sociales ha sido la capacidad de formular preguntas? ¿Podemos situar y contrastar el rigor, la autenticidad y la honestidad de la información y las inferencias realizadas por la IA? ¿Podemos darle sentido a la respuesta recibida, la entendemos, nos ayuda a aprender sobre nosotros mismos, los otros y el mundo que nos rodea? Sí, sé que son muchas preguntas, y hay muchas más, pero si queremos educar, no tenemos más remedio que encararlas. DAV. ¿La inteligencia artificial puede reducir la brecha de conocimientos y ampliar el aprendizaje más allá de los contextos? JSG. Personalmente, no lo tengo nada claro. Para responder, necesitaría información sobre cómo se sitúa en el contexto educativo. ¿Se entiende como el “oráculo de Delfos”, que nos da todas las respuestas? ¿Somos capaces de situar en qué fuentes se alimenta, de establecer un diálogo crítico con lo que nos ofrece o solo lo aceptamos de forma sumisa?  Trascender nuestros contextos, cuestionar nuestros marcos mentales, requiere predisposición, actitud crítica, capacidad de diálogo y ya es bien sabido que no basta con la mera posibilidad de acceder a la información. Siempre me he sentido muy a gusto en las bibliotecas y cuántas veces he pensado: “si tuviera tiempo para leer todo el saber recogido en todos estos miles de páginas, ¿cómo sería mi visión del mundo? ¿Qué podría hacer y pensar?”. Hoy, damos la espalda a muchas fuentes de saber y nos vamos a lo que parece más fácil, basta con hacer una búsqueda en una aplicación digital y copiar la respuesta. Pero ¿esto es aprender? ¿Me permite ampliar mi contexto? Por ahora, yo diría que no. No tengo otras evidencias. DAV. ¿Se podría afirmar que, tal como sostienen los expertos, la IA es una excelente herramienta para solucionar
Artículo Pluma Invitada

Antipedagogía de la presidenta peruana

David Auris Villegas – davidauris@gmail.com En lugar de debatir acerca de cómo optimizar la educación e industrializar al Perú, ahora con el megapuerto de Chancay, los relojes Rolex, que luce la presidenta Boluarte con apenas un 4 % de aprobación, continúan monopolizando la audiencia nacional y es la comidilla del momento. En un país colonizado por el crimen organizado y funcionarios que se enriquecen gracias al poder, la taimada actitud de Boluarte, desnuda al politicastro peruano que parecen una banda de rufianes. Se podría afirmar que esta casta política, acuñado por el presidente argentino Javier Milei, continúan saqueando al Perú. Tienen el cinismo de ostentar sus lujos ante millones de estudiantes que no desayunan y claman por mejores escuelas y educación. La presidenta, de espaldas a esta realidad, practica el ninguneo pedagógico, que significa la falta de respeto de un docente a la inteligencia de los estudiantes. Esto sucede, cuando Boluarte, durante tres semanas, se negó mostrar el origen de los relojes que lucía y, hoy día, esbozó su brillante estrategia de defensa, al decir que fueron prestados por el millonario y cuestionado gobernador de Ayacucho. Debido a la crítica situación de la educación y la crisis económica que vivimos, con treinta mil escuelas a punto  de colapsar, según los expertos, ¿sería ético que la mandataria luzca joyas estimadas en miles de dólares? Creo que no, ya que ella, con su actitud, vulnera el limpio espíritu de los niños y niñas en etapa de formación. Según Renato Silva, de Infobae, el 91 % de los peruanos opinan que la educación no ha mejorado en su gobierno. Solo le importa relumbrar su arrogante vanidad y mantenerse en el gobierno hasta el año 2026. Especular en cuanto a las joyas de Boluarte no es un signo de envidia, sino que se exige honestidad a la funcionaria más alta del Estado. Su falta de transparencia constituye un auténtico ejemplo de la antipedagogía, la cual arruina el esfuerzo que los educadores hacen en las escuelas, al cultivar la honestidad y el respeto hacia la dignidad humana como estilo de vida en los estudiantes. Cuando una lideresa no es creíble, transmite un mensaje negativo a los estudiantes y a la sociedad en relación con la práctica de la honestidad. Esta actitud contradice a los valores fundamentales de la democracia, promoviendo la creencia de que la verdad es calculada y que el fin justifica los medios, como señalaba Nicolás Maquiavelo. Los estudiantes, quienes son influidos por estos líderes, pueden desilusionarse, al observar a aquellos quienes desempeñan un papel de liderazgo mienten públicamente y no pagan las consecuencias. Asimismo, esta ridícula actitud de frivolidad y despilfarro, nos da a entender que ser presidente, congresista, gobernador, ministra o alta funcionaria en Perú, significa un suculento negocio que nos convertirá en nuevos ricos. De igual manera, tiene un impacto negativo en nuestra imagen internacional, limitando el turismo y las inversiones que tanto necesitamos para desarrollar. Boluarte, la todopoderosa presidenta, con su extraña actitud poco transparente, mintió al país y espantosamente subestima la inteligencia de los peruanos. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.
Pluma Invitada de Perú

Día Mundial del Agua y educación

Por: David Auris Villegas – davidauris@gmail.com ¿Se podrá resolver la escasez de agua potable en Perú, solo con un corazón sensible y manos limpias, tal y como dijo la presidenta Dina Boluarte? Lamentablemente, no se puede solucionar con un discurso tercermundista. Necesitamos ciencia, tecnología, gobernanza, gestión sostenible y educación hídrica para potabilizar tanta agua dulce que se pierde en el mar, ante la mirada sedienta de muchas personas. Esta ausencia de agua limpia, golpea la salud de los niños, los ancianos, los pacientes y a los grupos precarios. Al carecer de agua, la gente paga un costo elevado, lo cual afecta a las familias de bajos recursos, generando mayor pobreza en el territorio nacional. Consciente de esta crisis global, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con el propósito de fomentar una conciencia global hídrica, cada 22 de marzo, conmemora el Día Mundial del Agua. Su agenda se centra en el agua para la existencia del planeta y su gestión eficaz. En esta línea, el experto Pedro Arrojo Agudo propone una nueva cultura de agua para preservar la salud de los ríos, como un derecho humano, especialmente en las comunidades más vulnerables. De igual manera, el Objetivo del Desarrollo Sostenible incentiva a los países, lograr agua limpia para todos. Israel es un Estado situado en medio del desierto que, de forma exitosa, lidera el objetivo 6 de los ODS. Se ha convertido en un exportador de agua gracias a su tecnología de desalinización basada en la osmosis inversa, el moderno riego por goteo y una acertada gobernanza y cultura de agua a través de la educación ciudadana. Esta revolucionaria innovación ofrece una esperanza para la humanidad que, si no adoptamos esta forma de vida, claudicaremos la posibilidad de una cómoda vida de las futuras generaciones. Cada país está en la obligación de invertir más capital y enfocarse en la transferencia y el desarrollo de la tecnología para la producción de agua potable. Podría llevarse a cabo una campaña publicitaria educativa, promoviendo un consumo responsable de agua, de la mano con las personalidades más representativas del país, al igual que hace Israel. Con el fin de contrarrestar la crisis, resulta imperativo la inclusión transversal de la educación hídrica en el plan de estudios de las instituciones educativas. Los proyectos que involucran la creación de jardines y el reciclaje de agua para regarlos es clave. Los educadores, como líderes sociales, pueden contribuir al fomento de los hábitos de una cultura del cuidado de agua como estilo de vida. A pesar de la falta de una carrera profesional sobre agua en nuestro país, no es impedimento para que las universidades puedan establecer enfoques de investigación hídrica en sus programas de pregrado, maestría y doctorados. Una fuente adicional para impulsar la difusión del poder del agua, es la publicación de artículos y revistas científicas indexadas a repositorios de alto impacto, tales como Scopus, Web Of Science o Scielo, en temas de agua, y el ODS 6, con el fin de contribuir de manera científica al cuidado y cultivo del agua. Para finalizar, se trata del oro líquido más relevante de la especie humana. Su gestión, con capacidad pedagógica y tecnología eficaz, es una responsabilidad que corresponde a toda la ciudadanía. © David Auris Villegas. Escritor peruano, columnista pedagógico, profesor universitario y creador del ABDIVCP.
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